Vendaré mis pechos mientras te espero, para que no sangren por tu ausencia, para ahogar su quejido. Los envolveré fuerte. Así constreñidos no podrán dejarme en evidencia delante de todos, no podrán gritar tu nombre. Los amordazaré. Será el único modo de evitar que descubran mi secreto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario